Si no eres derechohabiente del Infonavit o del Fovissste, pero puedes comprobar ingresos y tienes un buen historial crediticio, puedes recurrir a las instituciones financieras, como los bancos o las Sofoles, que cuentan con programas de crédito hipotecario para que puedas comprar una casa o un departamento.
Características del crédito
Los créditos hipotecarios otorgados por bancos y sofoles se fijan en pesos, a tasas de interés que dependiendo de la institución pueden ir de 9.90 a 14% anual. Sus comisiones por apertura también varían: algunas instituciones no cobran por tal concepto, mientras que otras cobran hasta 3%, lo que puede llevar el CAT (costo anual total) hasta 17% anual.
El plazo para pagar tu crédito puede ser de 5 a 25 años, dependiendo desde luego de tu capacidad de pago. Y será necesario que reúnas 10% del valor de la casa como pago de enganche.
Requisitos
Para solicitar un crédito hipotecario a alguna institución financiera es requisito que no tengas deudas en el Buró de Crédito, que tengas por lo menos 18 años de edad. Se otorgan créditos hasta los 65 años, pero tu edad sumada al plazo del crédito no puede exceder los 70.
Otro de los factores que los bancos y sofoles toman en cuenta es tu arraigo laboral, es decir el tiempo que llevas en el mismo trabajo. Mientras más tiempo lleves en tu empleo más confianza sentirán las instituciones financieras para otorgarte el crédito. El mínimo requerido es de un año continuo.
En cuanto al monto del crédito que te otorgarán, este se define por tus ingresos. El banco o sofol calcula que los pagos mensuales que vayas a realizar no excedan 40% de tus ingresos, incluyendo otras deudas. En otras palabras, si ganas 20 mil pesos al mes y pagas tarjetas de crédito, pensiones alimenticias u otras deudas, éstas no pueden ser superiores a 8 mil pesos mensuales.
Seguros
Cuando contrates un crédito hipotecario, además de checar el CAT que la institución te cobrará, verifica los beneficios que te otorga, como los seguros de desempleo, que te cubren en caso que te quedes temporalmente desempleado; o bien, los seguros de vida, de daños y de responsabilidad civil.